Los ensayos clínicos son estudios de investigación llevados a cabo con el objetivo de desarrollar nuevas drogas más eficaces destinadas al tratamiento del cáncer de pulmón.
Los ensayos clínicos son estudios de investigación de nuevos fármacos en los que los pacientes pueden participar. En ellos se prueban nuevos tratamientos o comparan diferentes tipos de aplicación de tratamientos ya existentes.
Los ensayos clínicossiempre funcionan bajo unas normas muy estrictas que se denominan protocolo. Cada estudio está diseñado para encontrar las mejores maneras de prevenir, detectar, diagnosticar o tratar el cáncer, mejorar la calidad de vida de los pacientes y responder a múltiples interrogantes científicos.
El objetivo general de los ensayos clínicos es mejorar la atención del paciente oncológico y, en particular, mejorar la supervivencia global.
En la actualidad, en muchos hospitales españoles se llevan a cabo ensayos clínicos, una vez que los estudios de laboratorio han constatado la seguridad del tratamiento o procedimiento a evaluar y los resultados iniciales son prometedores o tienen un potencial superior a los métodos actuales. La mejor manera y la más segura para que un paciente reciba un fármaco o un tratamiento nuevo es siempre formar parte de un ensayo clínico aprobado, por las agencias reguladoras y los comités éticos de cada centro.
Hasta que la efectividad y seguridad de los nuevos tratamientos haya sido establecida y demostrada, se suelen utilizar sólo en casos de pacientes en los que la enfermedad no haya experimentado ninguna remisión o pacientes con recaídas tras varios tratamientos convencionales.
Es importante entender que no todos los pacientes son candidatos para recibir un nuevo tratamiento en fase de desarrollo, pero si el paciente está interesado en seguir uno de ésos tratamientos tendrá que hablarlo con su especialista.
Todos los pacientes que forman parte del estudio son controlados rigurosamente y la información que se recopila a lo largo de todas las fases del estudio se combina y analiza después por investigadores expertos. Los resultados ayudan a determinar cuáles son los mejores tratamientos y de ésta manera se consiguen tratamientos más efectivos y menos tóxicos para futuros pacientes.
Desafortunadamente no todos los nuevos tratamientos resultan mejores que los tratamientos ya existentes y probados, por lo que es fundamental llevar a cabo siempre intensos estudios clínicos para analizar absolutamente todos los datos de cada nuevo tratamiento.
Al mismo tiempo, el hecho de que a un paciente se le proponga participar en un nuevo estudio clínico no supone necesariamente que se le esté proponiendo participar en un nuevo tratamiento. El estudio puede estar probando simplemente nuevas maneras de usar tratamientos ya establecidos. En algunos hospitales, la inclusión de enfermos de cáncer en estudios clínicos es una parte de la práctica habitual.
Según se vayan descubriendo nuevos datos sobre estos tratamientos experimentales, su papel al lado de los tratamientos establecidos será más claro. Con el tiempo, si demuestran ser más efectivos o más seguros, podrán llegar a reemplazar a algunos de los tratamientos existentes.
Puedes hablar con tu equipo médico e informarte sobre si eres candidato a participar en algún ensayo clínico abierto en la actualidad.